cirugía plástica
blefaroplastia
Rejuvenece tu Mirada
La blefaroplastia es una cirugía estética diseñada para corregir los signos de envejecimiento en los párpados, eliminando el exceso de piel y las bolsas de grasa que pueden dar una apariencia de cansancio o tristeza. Este procedimiento busca realzar la belleza natural de tus ojos, brindándote una mirada más fresca y juvenil.
¿En qué consiste el procedimiento?
Realizamos la blefaroplastia bajo anestesia local, siguiendo estrictos protocolos de bioseguridad para tu tranquilidad. Dependiendo de tus necesidades específicas, podemos abordar el párpado superior, el inferior o ambos:
Párpado superior: Eliminamos el exceso de piel y, si es necesario, pequeñas acumulaciones de grasa.
Párpado inferior: Tratamos las bolsas grasas y ajustamos la piel para suavizar las ojeras y reducir la flacidez.
Cada paciente es único; por ello, realizamos una valoración previa para planificar el tratamiento más adecuado según tus características individuales.






















Cuidados postoperatorios
Para asegurar una recuperación óptima y resultados satisfactorios, es esencial seguir estas recomendaciones:
Reposo y actividad: Durante las primeras 48 horas, mantén reposo relativo. Evita movimientos bruscos, esfuerzos físicos y actividades que puedan aumentar la presión ocular.
Higiene: Mantén la zona limpia y seca. Puedes asear el rostro con toallitas húmedas suaves, evitando mojar directamente la área intervenida.
Protección: Usa gafas de sol oscuras al salir al exterior para proteger tus ojos del sol y del viento.
Medicación: Sigue las indicaciones médicas respecto a antibióticos y analgésicos para prevenir infecciones y controlar posibles molestias.
Compresas frías: Aplica compresas frías en los párpados durante las primeras 48 horas para reducir la inflamación y minimizar los hematomas.
Posición al dormir: Duerme boca arriba con la cabeza elevada utilizando varias almohadas; esto ayuda a disminuir la hinchazón.
Evita ciertos ambientes y actividades: No asistas a saunas, piscinas ni te expongas al sol directamente durante las primeras semanas. Además, limita el uso de dispositivos electrónicos como móviles, ordenadores y televisión en las primeras 48 horas para favorecer la recuperación ocular.
Recuerda que una comunicación abierta con tu cirujano y el seguimiento de estas indicaciones son clave para una recuperación exitosa. Estamos aquí para acompañarte en cada paso hacia una mirada renovada y llena de vitalidad.